Disney despliega su MAGIA con la exposición de su centenario en Madrid

«No hago películas para niños, las hago para nuestro niño interior»

Walt Disney

La exposición del centenario de Disney ya es por fin, aunque llegue mucho después de cumplirse la efeméride, una realidad en Madrid tras recorrer otros lugares del mundo. La podemos ver en la Fundación Canal de la capital. Walt Disney Archives expone algunos de sus más preciados tesoros en España. En la mismo podemos ver más de 250 piezas, repartidas en 9 galerías inmersivas que abarcan 100 años de historias Disney, entre las que figuran obras de arte y dibujos, objetos históricos como maquetas, vestuario, utilería y memorabilia, así como 14 instalaciones interactivas.

La gran exposición, organizada por Disney para celebrar 100 años de creatividad e innovación, homenajea a algunos de los personajes más icónicos e historias que han trascendido generación tras generación en todo el mundo. Comentaba en su comparecencia en Madrid Becky Cline, directora de los archivos de la compañía con sede en Burbank, que en sus cuarenta años en el estudio nunca ha podido ‘desconectar’ de la marca. Tanto es así que hasta en el lugar más recóndito del mundo donde menos pensaba encontrarse con Mickey, de repente se cruzó con una niña con una mochila del personaje.

Es esta experiencia algo transgeneracional y es que todos vamos a encontrar un recuerdo que nos evoque una película de Disney. Eso es debido a que encontraremos desde piezas de clásicos de Disney como Blancanieves y los siete enanitos (1937) a estrenos más contemporáneos, entre los que se incluyen Encanto (2021) y los recientes lanzamientos de Marvel, Pixar y Star Wars.

Las entradas para disfrutar de Disney: The Exhibition – 100 Años de Magia pueden adquirirse en https://disney100exhibit.com/es/madrid/

Un encuentro con la poseedora de ‘la llave’ de los archivos de Disney

“Nos emociona traer esta fantástica exposición a Madrid. Estamos deseando que los visitantes disfruten algunas de sus historias, personajes y atracciones favoritas de Disney de una forma nueva y envolvente, mientras celebramos todos los maravillosos mundos de Disney”.

Becky Cline, directora de Walt Disney Archives

En la presentación en Madrid tuvimos la suerte de escuchar a la garante del archivo de la Walt Disney Company,  Becky Cline. Uno de los momentos clave de su intervención fue cuando Jordi Cruz la preguntó por su objeto favorito de la exposición. Para ella es sin duda la bola de Mary Poppins, su película favorita. Lo mismo me ocurrió a mí cuando me acerqué a ella y pude observarla detenidamente. Me acordé en ese momento de una estampa preciosa. La de los Sherman tocando a Walt cada tarde ese Feed the birds que tanto llegaba al magnate de la animación. Todas las generaciones tenemos un momento que nos conecta con la magia Disney y el mío, al igual que le pasaba a Disney, era sin duda esta canción que entronca tanto con los valores universales de amor al prójimo que promulgaban las cintas clásicas del emporio del ratón Mickey con el que comenzó todo.

Desde hace más de 55 años, Walt Disney Archives preserva cuidadosamente algunas de las “joyas de la corona” de The Walt Disney Company

Es importante destacar que se han necesitado cuatro años para planificar y reunir los objetos que se exhiben en Disney: The Exhibition – 100 Años de Magia, y que los fans y amantes de Disney podamos ver por primera vez en España.

Esta muestra es posible gracias a las contribuciones creativas combinadas de Walt Disney ArchivesWalt Disney Animation Research Library, Walt Disney Imagineering, Disney Theatrical Group, Lucasfilm, Marvel Studios, Pixar Animation Studios, Walt Disney Music y The Walt Disney Family Museum.

La música también presente en la exposición

Desde los orígenes de Disney, el magnate del entretenimiento tuvo claro el poder evocador de las grandes canciones para contar historias. Dan buena muestra de ellos la música inolvidable de Blancanieves y los 7 enanitos o su gran proyecto personal: Fantasía. Es por ello que con Mickey como director de orquesta no podía faltar una sección dedicada a sus bandas sonoras, aunque se echase en falta alguna mención más explícita a sus compositores como los Hermanos Sherman y Alan Menken, que son el ADN musical de la compañía para varias generaciones. También encontramos un pequeño y anecdótico recorrido por la división teatral con la vista puesta en su joya de vender tickets: El Rey León con vídeos con testimonios del equipo creativo con Julie Taymor a la cabeza.

Durante la exposición podremos disfrutar de obras de arte, esculturas utilizadas para la animación, así como vestuarios y accesorios de las películas de acción real. Entre otros, esto incluye tanto el caballo del tiovivo de Mary Poppins (1964) -utilizado por la Leyenda de Disney Dick Van Dyke y con la que es imposible no querer fotografiarse-, como el vestido rojo de Cruella (2021), llevado por la actriz Emma Stone. Precisamente Cruella tiene su propio apartado en la exposición mostrando la evolución desde la villana animada a la icónica Glenn Close en el live action o la citada última revisión del malvado personaje Disney.



También podremos ver otros icónicos objetos y accesorios emblemáticos adicionales, como los libros del atrezzo original de Cenicienta (1950) y Merlín el Encantador (1963), la zapatilla de cristal de la versión de acción real de Cenicienta (2015), además de objetos de franquicias de nueva adquisición lejos del aroma del Disney primigenio y que al que aquí escribe no le suscitan excesivo interés, pero que suponen un aliciente extra para las nuevas generaciones. Sin duda, el vestuario de Indiana Jones supone uno de los elementos más icónicos de esta completísima muestra. No falta tampoco el Winnie The Pooh de la excelente Cristopher Robin, que cuenta la historia del autor del mítico personaje nacido en la literatura.

Las galerías temáticas suponen una experiencia inmersiva, e incluyen un paseo por una réplica de Main Street U.S.A. (de los parques Disney), así como oportunidades fotográficas que permiten a los visitantes posar junto a esculturas e impresiones de algunos de sus personajes preferidos, como: Mickey Mouse, la familia Parr de Los Increíbles (2004), Goofy, el Hada Madrina de Cenicienta (1950) o la familia Madrigal de Encanto.

En definitiva, nos encontramos ante un viaje inmersivo y único a los archivos de la compañía de los sueños que hará ‘volar’ su imaginación a todas las generaciones, desde aquellos que añoran el Disney clásico a los nuevos infantes pegados a las nuevas franquicias de la compañía. Simplemente imprescindible, simplemente… PURA MAGIA DISNEY.

Y las últimas notas del piano de Walt dejaron de sonar

«Su pregón da siempre emoción

es un ruego que va al corazón:

Compre usted, tenga piedad,

compre, compre, migas de pan»

No es ningún secreto que la canción favorita de Walt Disney era Feed the birds. Hoy, su coautor, Richard M. Sherman, nos ha dejado a los 95 años con una de las trayectorias más prolíficas de la industria del entretenimiento. A la muerte de Walt, los hermanos Sherman siguieron tocando en su despacho esta canción al piano que hoy sin duda resuena en los corazones de varias generaciones que hemos vibrado y hemos aprendido a amar el género del musical gracias a sus canciones. Quizás sea la canción que mejor ejemplariza lo que es dar y recibir amor, ese mensaje tan implícito en el Disney clásico. De eso iba esta canción y probablemente el propio legado de los Sherman que se dieron en cuerpo y alma para llevar sus mensajes optimistas y emocionales a los espectadores de todas las edades.

El primer recuerdo que tengo de su música sin duda es a través de Mary Poppins en una emisión televisada por el espacio Cine Disney de Telecinco. Me quedé pegado a la pantalla con esa historia y esas canciones que fui incapaz de quitarme de la cabeza. La descubrí como mi generación y las anteriores doblada con voces en castellano que para mí resuenan a infancia. Poco después emitirían por cierto La Bruja Novata y otra vez la magia me invadiría con esas canciones. Por supuesto a los 7 u 8 años yo no conocía la figura de estos hermanos, pero a través de su música me han acompañado toda mi vida. Después llegarían a mi vida las melodías de Merlín, el encantador, El libro de la selva y la muy reivindicable Chitty Chitty Bang Bang, fuera de la Disney y con guion del mismísimo Roald Dahl.

Quizás el momento en que fui consciente de lo que los Sherman han supuesto en la historia del cine y del espectáculo fue con una película por la que tengo una especial inclinación. Se trata de Al encuentro de Mr. Banks en la que vemos la lucha de Walt Disney por conseguir los derechos cinematográficos de Mary Poppins, mi película favorita desde aquel citado primer visionado hace cerca de 30 años. En la cinta que mostraba el proceso creativo de la inolvidable cinta, los Sherman se convertían también a los ojos del espectador en protagonistas merecidos de la historia de Disney. Después llegaría el documental The Boys, donde conocíamos la trayectoria y la no tan idílica relación de los hermanos y que tanto me sirvió de base para un proyecto que confío sacar adelante muy pronto.

Esta madrugada, sobresaltado por la noticia, la segunda canción que me vino a la cabeza en este momento fue una que los Sherman compusieron ante la ‘incredulidad’ de la pérdida de Walt. Hoy, como el protagonista infantil de La Bruja Novata nos sentimos así. Hemos perdido un trocito de la MAGIA que nos ha construido como adultos y es que «Cuando crees que ya no eres un niño y cuando en jugar no hay ya ilusión, viene la edad un poco triste y la incredulidad nació».

Richard M. Sherman tuvo la oportunidad de tocar por última vez la canción favorita de Walt en su despacho no hace mucho. Lo hizo para el momento más emotivo de Érase una vez un estudio en el que Mickey mira un retrato de Walt Disney mientras suena de fondo Feed the birds. Si es que existe un cielo ‘mágico’, seguro Richard y Robert se la estarán tocando al eterno Tío Walt.

La magia Disney cobra fuerza en Madrid en el día de su centenario

Todos tenemos en nuestra memoria un recuerdo asociado a la Walt Disney Company. Unos será La Sirenita, otros entrados ya en años será La Cenicienta, los más jovencitos se decantarán por Frozen o Encanto e incluso algunos intrépidos nos atrevemos con El Jorobado de Notre Dame. Generaciones de ayer, hoy y siempre se dan cabida en una serie de actividades que hoy cobran mayor fuerza como día oficial en el que se fundó el estudio Disney de animación. Precisamente dedicado a la obra animada, al igual que el mágico corto Érase una vez un estudio que se ha estrenado hoy en Disney + en el que no falta ni el rey Leónidas de La Bruja Novata, llega mañana una interesante exposición a un espacio a reivindicar: El Espacio Cultural Serrería Belga de Madrid. A escasos metros de Atocha podréis disfrutar de la exposición gratuita Walt Disney Animation Studios: Un siglo de historias. Un grupo de privilegiados hemos podido adentrarnos en la misma por adelantado y os contamos algunas claves. Tranquilos, que podréis verla de forma gratuita desde el 17 al 29 de octubre en el Espacio Cultural Serrería Belga (C. de la Alameda, 15), centro gestionado por el Área de Cultura, Turismo y Deporte del Ayuntamiento de Madrid.

La exposición comienza con los carteles de todas las películas de animación del estudio desde Blancanieves y los 7 enanitos hasta la futura Wish: El Poder de los deseos, que tiene por cierto un espacio destacado en la exposición.

A lo largo de la exposición iremos descubriendo a través de textos e imágenes cómo el estudio ha ido evolucionando en este centenario. Podremos ver momentos imborrables que nos llevarán desde el origen que nos harán recordar que «todo empezó con un ratón». Imposible no acordarse en ese momento de la escena más emotiva de Érase una vez un estudio en la que Mickey y Walt Disney unen energías mientras suena de fondo el Feed the birds de Mary Poppins de los Sherman que se convirtió en la canción favorita del magnate del entretenimiento.

Muestra del paso del tiempo y de cómo la animación ha evolucionado se encuentran joyas como las que nos presenta al Pepito Grillo de Pinocho cuando la animación era algo completamente artesanal.

No faltan en el recorrido desde La Bella Durmiente a Merlín, el encantador, otra joya con música de los hermanos Sherman, a El libro de la selva, la última película con el toque maestro de Walt Disney. Eso por hablar del Disney más clásico. Tampoco faltan las películas del renacimiento con música de Alan Menken, esencial junto a Howard Ashman en ese resurgimiento, como La Sirenita, La Bella y la Bestia, Aladdin o El Jorobado de Notre Dame sin olvidarnos de las recientes Encanto o la futura Wish, que cuenta con un photocall y un lugar de los deseos en la sala de proyección que incluye mágicos momentos Disney, el tráiler de Wish y el de Érase una vez un estudio.

La exposición tendrá varias actividades complementarias muy interesantes para entender el legado del estudio en estos 100 años:

Sábado 21 de octubre

17:30h y 19:00h 

Ponencia «El arte de contar historias a través del diseño de personajes» por Fernando Güell (director de arte, diseñador de personajes y guionista). 

Sábado 28 de octubre

17:00h 

Ponencia «Sith, creando una historia original para el universo Star Wars» por Rodrigo Blaas (director, animador, showrunner y productor ejecutivo).

18:30h 

Ponencia “100 años de Walt Disney Animation Studios: un homenaje a sus cortos” por Cristina Díaz (directora de comunicación The Walt Disney Company Iberia).

Además, el universo Disney se extiende por Madrid con más iniciativas. A la reciente exposición interactiva de El Corte Inglés de Castellana se suma la instalación en Madrid Río. Así, desde hoy hasta el 22 de octubre, un circuito de 12 paneles contará la historia de The Walt Disney Company desde sus orígenes en 1923 hasta nuestros días en el distrito de Arganzuela (Avenida del Manzanares, trasera del Invernadero del Palacio de Cristal de Arganzuela). Además, en otro punto emblemático como la Plaza de España habrá un corpóreo de Disney 100 de 7 metros de largo x 2,5 metros de alto y un corpóreo de Mickey Mouse de más de 3 metros de altura que estarán instalados desde el 13 al 18 de noviembre. Todo ello a la espera de noticias de la exposición del centenario que está girando por todo el mundo y que esperamos se confirme pronto fechas para España. La magia Disney sigue brillando con su estrella azul en su centenario.

Angela Lansbury: La Bruja Novata que enamoró a varias generaciones

Anoche millones de espectadores sentimos que se rompía un trocito de nuestro alma infantil. La de aquellos que vimos en un VHS del videoclub del barrio primero y después en el mítico programa Cine Disney en España los fotogramas de una película que aún siendo ‘vieja’ como era ya a mediados de los 90 nos fascinaba de una forma asombrosa. Sí, era pura magia Disney aunque ya no estuviese entre nosotros cuando finalmente se realizó -en la primera ‘intentona’ como sustituta de Mary Poppins mientras conseguía los derechos era tal el desinterés del magnate del entretenimiento que se quedó dormido mientras los Sherman le presentaban las canciones.

La cinta en VHS está a la venta en muchos portales de coleccionismo como Wallapop.

Sin duda, acudíamos a ella de una forma inconsciente ya que nos atraía una carátula que nos llevaba a Mary Poppins, cuya comparación constante con la misma hizo que esta sobresaliente cinta -para mí sigue siendo una de las obras maestras del estudio- pasase durante un tiempo a un segundo plano en los espectadores más cinéfilos. Una pena. Allí descubrimos los misterios del arte de la brujería de la mano de una peculiar mujer que nos cautivó desde su primera aparición en pantalla con ese casco y ese sidecar con el que acudía a recoger los paquetes de curso de hechicería por correspondencia. No lo sabíamos entonces siendo unos niños, pero para muchos Angela Lansbury se convertiría en alguien muy especial en nuestras vidas.

Junto a los Hermanos Sherman y a su inolvidable compañero David Tomlinson

No podría decir el número de veces que he visto la película -muchas de ellas en los últimos años para reivindicar la cinta en un libro que estoy coescribiendo. Lo que sí tengo claro es que no dejo de quedarme pegado en la butaca con la señora Lansbury con esa humanidad que traspasa la pantalla cuando interpreta The age of not believing, uno de los mejores temas de los hermanos Sherman en mi modesta opinión. La escribieron por cierto después de la muerte de Walt cuando sentían que ya no podrían volver a creer en la magia… Disney. A pesar de los tijeretazos -existe en dvd una versión completa de la cinta- y de la escena del partido de fútbol -que muchos miembros del equipo odiaban, La Bruja Novata se está convirtiendo con el tiempo en el merecido clásico de culto que merece ser. Desde anoche nos sentimos un poco como Charlie, el hijo adoptivo de Eglentine Price al que le canta algo así como «Tu podrás pasar por eso prueba y comprenderás si quieres tú que habrá algo en ti que hará que puedas salir del pozo y ver la luz». Volviendo a ver y escuchar la deliciosa voz de Lansbury en pantalla seguro que logramos salir del pozo y ver la luz.

La gran cualidad de Angela Lansbury es que destilaba luz incluso cuando se metía en la piel de un personaje tan siniestro-maternal como Mrs Lovett, mi segundo gran encuentro con la figura de Angela Lansbury. Creo que más o menos cuando vi el Sweeney Todd de Mario Gas, una de las cimas del teatro musical hecho en España, se editó en DVD la producción televisiva que protagonizó Angela Lansbury. Por supuesto, me lo compré en cuanto tuve ocasión y hoy me va tocar volver a verlo, lo tengo clarísimo y eso que lo he visto un buen puñado de veces. Recuerdo de ese primer visionado que descubrí a la estrella de Broadway que estaba detrás de esa actriz que había marcado mi infancia. Esa mezcla de lo más siniestro con ese espíritu maternal -del que cogería algo como confesaría años después para su maravillosa Mrs Pott en La Bella y La Bestia– me cautivó e hizo que mi interés por Lansbury a través de grabaciones musicales, videos de galas en Youtube y por supuesto películas creciese.

Probablemente algunos lectores les sorprenderá que aún no haya aparecido Se ha escrito un crimen en este imaginario emocional por los diferentes momentos en que Angela Lansbury apareció en mi vida. Tranquilos, ha llegado el momento. Recuerdo haber visto muchos capítulos en mi infancia en las tardes de Antena 3, pero admito que no me llamaron especialmente la atención. Tuvo que venir el confinamiento en 2020 para que me pegase un atracón de lo más disfrutón de esta seria gracias a las reposiciones en la TDT. Entonces sí, me hice fan de Jessica Fletcher en un momento en que aún saboreaba con fricción sus últimas apariciones cinematográficas. Hoy Marc Shaiman recordaba en su Instagram lo especial que había supuesto componer para ella en Mary Poppins Returns. Yo solo puedo decir que cada vez que veo esa escena ‘floto’ como los compradores de esta señora de los globos.

Aunque en la cinta no coincide en pantalla con Dick Van Dyke, sí lo hizo hace no mucho en una película inédita en España titulada Buttons que nos hace el regalo de poder ver actuar y cantar a estas dos leyendas del cine, el teatro y la televisión. Nada mejor que despedirla trabajando feliz con el que fuera protagonista de Mary Poppins. Gracias Angela Lansbury por hacer de nuestras vidas un poquito mejor gracias a tus mágicos trabajos. Nunca te olvidaremos Eglantine Price, Mrs. Lovett, Jessica Fletcher. Nunca te olvidaremos Dame Angela Lansbury.

El retorno de las brujas 2: Un acertado autohomenaje a todo un icono de la cultura pop

Ya hemos podido ver en primicia la esperada El retorno de las brujas 2 que llega hoy a Disney +. Es conveniente echar un poco la vista atrás para entender cómo un proyecto en el que pocos confiaban se terminó convirtiendo en un auténtico clásico de culto de la factoría del ratón Mickey. Para ello viajamos en escoba al verano de 1993 cuando llegaba a los cines un largometraje concebido para la fiesta de Halloween. Llega así en una época muy poco propicia Hocus Pocus (aquí El retorno de las brujas), una cinta en la que pocos directivos de la Walt Disney Company confiaban. Solo la presencia de una super estrella como Bette Midler hizo que la balanza finalmente se decantase por estrenarla en salas de cine en lugar de en el emergente Disney Channel. Recaudó de milagro lo que había costado, no era la calima veraniega un buen tiempo para una historia de Halloween que no encontró su hueco en esas fechas por el estreno de Pesadilla antes de Navidad.

Entonces, ¿Cómo es posible que una generación como la mía incluyese esta cinta entre sus particulares pasiones cinéfilas infantiles? Pues por un lugar mágico en el que cada semana teníamos para elegir decenas de títulos. Sí, yo alquilé (una y otra vez) El retorno de las brujas en el videoclub Magallanes a escasos metros de mi casa en Santander. La generación de esta película somos eso que llaman «la generación del videoclub». Yo y otros millones de niños esperábamos ansiosos ese momento de volver a revisar las novedades en las estanterías de esos lugares inolvidables que hemos sustituido por las plataformas de streaming. En cuanto al éxito de El retorno de las brujas en España mucha culpa la tuvo ela posterior emisión en el inolvidable espacio televisivo Cine Disney gracias al cual muchos niños nos enamoramos de la magia del séptimo arte. En fin, con los años esta película en la que nadie parecía confiar se terminó convirtiendo en un guilty pleasare cuando nos volvíamos adultos. De repente, un día con el tiempo descubríamos que en el fondo muchos seguíamos hechizados por el embrujo de las hermanas Sanderson. Así al hacerse masivo y notorio este ‘placer culpable’ se convertiría en un clásico de culto de Disney con la consiguiente salida al mercado de Funkos, figuras varias, camisetas y todo tipo de merchandising, aunque incomprensiblemente la película no se haya editado nunca en España en bluray. Bendito Disney + que nos permite disfrutarla con el doblaje original en español y combinarlo por supuesto con la versión original cuando se tercie.

Tras muchos rumores de una hipotética secuela, llegó el momento. Nada menos que 29 años después y con las tres intérpretes originales. Sí, señoras y señores The witches are back como reza esta adaptación del mítico tema de Elton Jhon con el que nos deslumbran estas tres brujitas, muy especialmente la inmensa Bette Midler que sigue llevando para nuestra fortuna la voz cantante de esta secuela. Y sí, como en la cinta original la música vuelve a jugar un papel importante aunque no escucharán ese tema que todos están esperando. Y, ¿saben qué? Que no importa, su «sustituta» es nada menos que One way or another que al igual que pasaba con I put a spell on you cuenta con la adaptación, arreglos y letras adicionales -al igual que muchos de los proyectos de Midler- del genial Marc Shaiman que definió a la diva en nuestra reciente entrevista como «la mejor artista de nuestro tiempo». La banda sonora original vuelve a ser de John Debney. La escena por momentos es una mímesis de la escena del carnaval de la cinta original. Es parecido, pero no es lo mismo. El número se hace más grande aún con unas estupendas coreografías de todos los ciudadanos de Salem que derivan en una especie de flashmob según el alcalde al que persiguen nuestras protagonistas. En ese concurso tan especial incluso hay un guiño drag a las propias hermanas Sanderson que se han convertido en todo un icono para la cultura LGTBI desde hace varias décadas y es que estos personajes son pura cultura pop que afortunadamente traspasan generaciones. Hay más guiños y algún easter egg a la película original, pero es mejor que los descubran por su cuenta.

Kathy Najimy as Mary Sanderson, Bette Midler as Winifred Sanderson, and Sarah Jessica Parker as Sarah Sanderson in Disney’s live-action HOCUS POCUS 2, exclusively on Disney+. Photo by Matt Kennedy. © 2022 Disney Enterprises, Inc. All Rights Reserved.

No me quiero olvidar de algo en lo que acierta de lleno esta secuela. En emular la nostalgia sin destrozar nuestros recuerdos a base de innecesario CGI y efectos digitales a cascoporro. Uno tiene la sensación de que esta secuela se podría haber hecho hace muchos años y eso para ese niño que iba cada viernes al videoclub a alquilar sus películas favoritas es importante. Algo parecido me ocurrió con la inolvidable El regreso de Mary Poppins. A pesar de las incorporaciones -incluidas esas niñas mini Sanderson que nos sirven para poder decir que el comienzo es una especie de precuela y que ralentizan en exceso la aparición de las verdaderas protagonistas- lo mejor sigue siendo tener de vuelta a Bette Midler, Sarah Jessica Parker y Kathy Najimy, una de esas actrices cómicas de los 90 que con su simple presencia se gana el cariño del público-les recomiendo que la vean no solo en Sister act, también en la muy reivindicable Ratas a la carrera junto a los mejores cómicos de varias generaciones.

Kathy Najimy as Mary Sanderson, Bette Midler as Winifred Sanderson, and Sarah Jessica Parker as Sarah Sanderson in HOCUS POCUS 2, exclusively on Disney+. Photo by Matt Kennedy. © 2022 Disney Enterprises, Inc. All Rights Reserved.

En definitiva, El retorno de las brujas 2 es un producto cinematográfico divertido que bebe de la nostalgia, pero que aporta un ratito de diversión de lo más disfrutable con 3 viejas conocidas y hasta un zombie que vuelve a ser ese genio y figura que es Doug Jones. Desde luego, un buen motivo de verdad para suscribirse a Disney +, aunque -llámenme nostálgico si quieren- me hubiese encantado ver la película dirigida por Anne Fletcher -que releva al inolvidable Kenny Ortega seguramente para darle un toque más femenino a esta entretenida historia- en pantalla grande. Por cierto, al entretítulos tienen momento musical de primera y al finalizar hay escena poscréditos. De nada.

Doug Jones as Billy Butcherson in HOCUS POCUS 2, exclusively on Disney+. Photo by Matt Kennedy. © 2022 Disney Enterprises, Inc. All Rights Reserved.