Angela Lansbury: La Bruja Novata que enamoró a varias generaciones

Anoche millones de espectadores sentimos que se rompía un trocito de nuestro alma infantil. La de aquellos que vimos en un VHS del videoclub del barrio primero y después en el mítico programa Cine Disney en España los fotogramas de una película que aún siendo ‘vieja’ como era ya a mediados de los 90 nos fascinaba de una forma asombrosa. Sí, era pura magia Disney aunque ya no estuviese entre nosotros cuando finalmente se realizó -en la primera ‘intentona’ como sustituta de Mary Poppins mientras conseguía los derechos era tal el desinterés del magnate del entretenimiento que se quedó dormido mientras los Sherman le presentaban las canciones.

La cinta en VHS está a la venta en muchos portales de coleccionismo como Wallapop.

Sin duda, acudíamos a ella de una forma inconsciente ya que nos atraía una carátula que nos llevaba a Mary Poppins, cuya comparación constante con la misma hizo que esta sobresaliente cinta -para mí sigue siendo una de las obras maestras del estudio- pasase durante un tiempo a un segundo plano en los espectadores más cinéfilos. Una pena. Allí descubrimos los misterios del arte de la brujería de la mano de una peculiar mujer que nos cautivó desde su primera aparición en pantalla con ese casco y ese sidecar con el que acudía a recoger los paquetes de curso de hechicería por correspondencia. No lo sabíamos entonces siendo unos niños, pero para muchos Angela Lansbury se convertiría en alguien muy especial en nuestras vidas.

Junto a los Hermanos Sherman y a su inolvidable compañero David Tomlinson

No podría decir el número de veces que he visto la película -muchas de ellas en los últimos años para reivindicar la cinta en un libro que estoy coescribiendo. Lo que sí tengo claro es que no dejo de quedarme pegado en la butaca con la señora Lansbury con esa humanidad que traspasa la pantalla cuando interpreta The age of not believing, uno de los mejores temas de los hermanos Sherman en mi modesta opinión. La escribieron por cierto después de la muerte de Walt cuando sentían que ya no podrían volver a creer en la magia… Disney. A pesar de los tijeretazos -existe en dvd una versión completa de la cinta- y de la escena del partido de fútbol -que muchos miembros del equipo odiaban, La Bruja Novata se está convirtiendo con el tiempo en el merecido clásico de culto que merece ser. Desde anoche nos sentimos un poco como Charlie, el hijo adoptivo de Eglentine Price al que le canta algo así como «Tu podrás pasar por eso prueba y comprenderás si quieres tú que habrá algo en ti que hará que puedas salir del pozo y ver la luz». Volviendo a ver y escuchar la deliciosa voz de Lansbury en pantalla seguro que logramos salir del pozo y ver la luz.

La gran cualidad de Angela Lansbury es que destilaba luz incluso cuando se metía en la piel de un personaje tan siniestro-maternal como Mrs Lovett, mi segundo gran encuentro con la figura de Angela Lansbury. Creo que más o menos cuando vi el Sweeney Todd de Mario Gas, una de las cimas del teatro musical hecho en España, se editó en DVD la producción televisiva que protagonizó Angela Lansbury. Por supuesto, me lo compré en cuanto tuve ocasión y hoy me va tocar volver a verlo, lo tengo clarísimo y eso que lo he visto un buen puñado de veces. Recuerdo de ese primer visionado que descubrí a la estrella de Broadway que estaba detrás de esa actriz que había marcado mi infancia. Esa mezcla de lo más siniestro con ese espíritu maternal -del que cogería algo como confesaría años después para su maravillosa Mrs Pott en La Bella y La Bestia– me cautivó e hizo que mi interés por Lansbury a través de grabaciones musicales, videos de galas en Youtube y por supuesto películas creciese.

Probablemente algunos lectores les sorprenderá que aún no haya aparecido Se ha escrito un crimen en este imaginario emocional por los diferentes momentos en que Angela Lansbury apareció en mi vida. Tranquilos, ha llegado el momento. Recuerdo haber visto muchos capítulos en mi infancia en las tardes de Antena 3, pero admito que no me llamaron especialmente la atención. Tuvo que venir el confinamiento en 2020 para que me pegase un atracón de lo más disfrutón de esta seria gracias a las reposiciones en la TDT. Entonces sí, me hice fan de Jessica Fletcher en un momento en que aún saboreaba con fricción sus últimas apariciones cinematográficas. Hoy Marc Shaiman recordaba en su Instagram lo especial que había supuesto componer para ella en Mary Poppins Returns. Yo solo puedo decir que cada vez que veo esa escena ‘floto’ como los compradores de esta señora de los globos.

Aunque en la cinta no coincide en pantalla con Dick Van Dyke, sí lo hizo hace no mucho en una película inédita en España titulada Buttons que nos hace el regalo de poder ver actuar y cantar a estas dos leyendas del cine, el teatro y la televisión. Nada mejor que despedirla trabajando feliz con el que fuera protagonista de Mary Poppins. Gracias Angela Lansbury por hacer de nuestras vidas un poquito mejor gracias a tus mágicos trabajos. Nunca te olvidaremos Eglantine Price, Mrs. Lovett, Jessica Fletcher. Nunca te olvidaremos Dame Angela Lansbury.

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