Este fin de semana hemos vivido de primera mano DESDE MI BUTACA el nacimiento de dos proyectos. Una nueva sala y el proyecto tres vías del Instituto del Teatro de Madrid. Nave 73 es una apuesta escénica que nada a contracorriente, que apuesta por el TEATRO en tiempos convulsos. Hoy más que nunca es todo un riesgo abrir una nueva sala, pero precisamente esas salas alternativas que nacen de la pasión y el amor escénico hacen que la escena madrileña esté más viva que nunca. Estos proyectos fomentan la creatividad y la colaboración entre las compañías, dispuestas a actuar casi sin cobrar, y estos pequeños pozos de esperanza en que se han convertido las salas del circuito off, como si de un hermano pequeño de su homónimo neoyorquino se tratase. Nos adentramos en esta nueva sala donde se respira entusiasmo de sus gerentes que agradecen los llenos diarios, ayer se quedaron varias personas sin poder entrar, de los espectáculos que ha traído el Instituto del Teatro de Madrid. Montajes llenos de buen hacer y trabajo duro. De ensayos a deshoras y, sobre todo, de amor por el arte.
Ayer se cerró el proyecto de las tres vías del ITEM con la propuesta contemporánea, Las moscas. Entre el maravilloso reparto del montaje no dudé un momento en fijar mi mirada en dos actrices magnéticas, pura emoción. Las dos comparten algo, la procedencia y que son buenas amigas. Cuando entra en escena Marleyda Soto Ríos en mitad de toda esa pudredumbre que refleja la atmósfera de Las moscas, uno solo se puede fijarse en ella. Irradia humanidad con ese criado encogido, que parece sacado de una obra de Tadeuz Kantor. Cuando desaparece de escena la echamos de menos, hasta que en el tramo final vuelve a emocionar al público. Es aún más difícil destacar cuando el personaje no es protagónico, destacar dentro del pueblo o de los soldados, pero nos sobran los ejemplos en que un buen montaje basa su éxito o su fracaso en jugar sus cartas a los secundarios. Ana María Gómez Valencia, con su voz desgarrada llena de emoción cual heredera de ‘La Lupe’, toma la voz cantante como pueblo y como soldado. Las dos amigas han venido a Madrid para hacer el Máster que organiza el Instituto del Teatro de Madrid. Una suerte poder haber disfrutado de su trabajo anoche. Además, Marleyda tiene una nueva cita con los espectadores madrileños el próximo 22 de mayo con El protocolo en Garaje Lumiére, pero esa es otra historia que les contaremos más adelante DESDE MI BUTACA.