Durante las últimas semanas, dos espectáculos han abierto y cerrado la programación de Garaje Lumiére. Los lunes ha sido el turno de la exitosa revisión del clásico El perro del hortelano. Y para cerrar la semana El protocolo, primer montaje «de texto» del director chileno Rodrigo Claro.
¿Cómo hubiera representado El Perro del Hortelano una compañía de cómicos pobres en la época de Lope de Vega?
Hubieran desplegado su tenderete, intentando llegar a todo tipo de público, desde mendigos y mercaderes a cortesanos; cambiando vertiginosamente de vestuario y usando complementos y máscaras para poder representar todos los personajes de la obra con tan sólo cuatro actores…


