El miércoles, Susana de la Sierra, ahora ya ex directora del Instituto de Cinematografía, participaba en en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo en en curso que homenajeaba a la figura del director argentino Juan José Campanella, al que tendremos este domingo en exclusiva DESDE MI BUTACA. Apenas 24 horas después, se hacía pública su renuncia a un cargo que suele estar rodeado de polémica. Ha sido sin duda una de las voces dentro del ejecutivo que más ha luchado por defender los intereses del cine, pero de alguna forma ha sentido que el gobierno la ha dado la espalda con continuas promesas incumplidas. La última decepción ha sido el anuncio en el anteproyecto de reforma fiscal de que las desgravaciones para el cine iban a quedarse prácticamente donde estaban. La sustituirá en el cargo Lorena González, una funcionaria sin experiencia en la gestión cultural. De alguna forma, la comparecencia de Susana de la Sierra en la UIMP sirvió un poco de balance de esta etapa, ¿Su futuro? Seguramente volverá a la docencia, ya que es profesora de Derecho Administrativo en la Universidad de Castilla-La Mancha en Toledo.

Entre los aspectos que destacó en su intervención estuvo su reivindicación del colectivo femenino en el mundo del cine: «En el mundo audiovisual, sólo el 7% de los trabajadores son mujeres». En ese sentido, se sentía orgullosa de que este año el Premio Nacional de Cinematografía recayese en una mujer, Lola Salvador: «Es la octava mujer que recibe ese reconocimiento y la primera vez que recae en una guionista». Insistió también en la necesidad de introducir en la Educación una asignatura reglada de Cine. Aunque defendió las subvenciones con uñas y dientes, no entró a valorar las promesas incumplidas del Ejecutivo que la han hecho finalmente dejar el cargo. Las coproducciones con países tan lejanos como Finlandia como base para la supervivencia de nuestro cine también estuvieron presentes en esta comparecencia en la que estuvo arropada por Álvaro Longoria que destacó de ella que «Sé que ha luchado por defender los intereses del cine español».
