Una Feria es algo así como una boda en la que se reúnen los profesionales de la ‘familia’ de las artes escénicas con el objetivo de seguir tejiendo lazos para que sus espectáculos lleguen a los principales teatros de todo el territorio. Esta sensación se acrecienta por ejemplo en los improvisados “salones de boda” en que se convierten los restaurantes de Albacete estos días en el que se juntan compañías, distribuidores, programadores, técnicos y profesionales de todas las extensas áreas de las artes escénicas para comer y reencontrarse tras estos casi dos años de sequía de este tipo de eventos. Ayer de alguna forma se llevó este hecho a la máxima expresión con una de las JOYAS de la Feria: Everlasting Love, una peculiar boda en la que reivindicar el amor propio no solo delante de los profesionales del sector. También delante de esos escolares que rieron ‘a pierna suelta’ con el ingenioso montaje de Mayte Olmedilla, talento local por cierto. Esta artista, enamorada abandonada en el salón de bodas al que estamos invitados, lo mismo lleva a la máxima expresión el clown que te canta ¿cómo no? Everlasting love, nos monta un karaoke con canción de Elton John, crea una melodía con las copas de la boda, pone a bailar a los langostinos y sí, también es una músico consumada capaz de captar la atención de todos los públicos. Esta es una fiesta que lo mismo pueden ver los chavales en campaña escolar que programarse en sesión golfa para disfrute de los más noctámbulos. Solo les digo una cosa: si ven este espectáculo en su teatro más cercano -programadores, de verdad que merece mucho la pena- no duden en ir a verlo. Saldrán un poquito más felices de cómo entraron, ¿se puede pedir más? Imposible.

Foto: Lucia González-Aron Multimedia
Nos alejamos del Teatro Circo de Albacete donde hemos disfrutado a mediodía para acercarnos al Teatro de la Paz. Allí, nos espera una aventura que seguro no podrán olvidar en la que por un ratito se convertirán en conquistadores de tierras aún desconocidas. La propuesta de Teatro Clásico de Sevilla es uno de esos espectáculos que cautiva desde que se levanta el metafórico telón. En escena, solo necesitamos unos pocos elementos escenográficos para creer que nos embarcamos en la mayor de las aventuras. Uno tiene la sensación de que por una tarde, el teatro recupera eso que los ingleses dicen tan claro: “to play”. Nuestros intérpretes ‘juegan’ a vivir mil y una aventuras sin descanso también para el espectador. Gracias a la brillante dramaturgia de Alfonso Zurro a partir de los textos de 8 autoras y autores consiguen darnos una lección de historia bien narrada que resulta realmente apasionante para el espectador. No me quiero olvidar de las coreografías de Baldo Ruiz que hacen que cada movimiento de los entregados actores brille con luz propia. Por último y no por ello menos importante -más bien todo lo contrario- quiero mentar al reparto coral uno por uno y es que no hay fisuras en su trabajo, todos cumplen con nota su cometido desde los más veteranos hasta los jóvenes. Así, es maravilloso como se mezcla la veteranía en las tablas con la frescura y el impresionante trabajo físico de los más jóvenes. Juan Motilla, Luis Alberto Domínguez, Manuel Rodríguez, Santi Rivera, Íñigo Núñez, Piermario Salerno, Fernando Lahoz y Óscar Corrales brillan en esta puesta en escena que cuenta con una impactante escenografía y un estupendo vestuario a cargo de Curt Allen Wilmer y Leticia Gañán. En fin, uno de esos espectáculos que espero giren mucho. Yo cuando tenga oportunidad repetiré. No les quepa la menor duda.

Foto: Lucia González-Aron Multimedia
Entramos en la recta final del día con una buena ración de música y teatro. El Auditorio de Albacete acogió una de las citas más esperadas a nivel musical de la Feria. El concierto de Karmento, artista local en ebullición que estamos seguros dará mucho que hablar en los próximos meses. Tras su paso por el programa especial que grabó Nova Onda en el citado espacio escénico, Karmento nos ofreció un recital en el que se notaba que jugaba en casa incluso cuando se coló una inesperada voz desde el patio de butacas que llamaba a su “tata”. El concierto fue un particular viaje a nuestra esencia y con las pies en la tierra esta manchega en la azotea reclama que necesitamos “respirar un cambio desbocado entre la multitud” como reza su Que vuelva la magia. Tras emular ese momento de felicidad de la infancia, la artista recibió el calor de su público en una cita musical inolvidable gracias también a los estupendos músicos que la acompañan.

Ya por la noche conocimos a Carsi. Como curiosidad, este era el único título de la Feria que ya había visto en su día en el Teatro de la Abadía. Para mí, la ‘marca’ Noviembre Teatro es una garantía de calidad artística. ‘Los de los clásicos’ cambian de tercio en esta reivindicación del oficio de cómico de la legua para ponernos delante del espejo deformante a un actor de ‘los de antes’ que decían que escuchaba los partidos de fútbol mientras hacía a los clásicos. Seguro que esta anécdota les suena, ¿verdad? El protagonista ausente en la mayor parte de la función es una mezcla de todos esos intérpretes de otro tiempo que nos hicieron amar el teatro. En escena, además del fantástico elenco masculino hay una única actriz: Elena Rayos que cual camaleón nos sorprende con personajes como el de la desternillante filóloga que descubre la obra con la que pretenden que Carsi haga ‘el canto del cisne’ sobre el escenario. Viendo la función ayer por segunda vez caí en la cuenta de lo ‘oportuna’ que es una función como esta -con pullas y guiños desde al teatro público a los propios programadores que a buen seguro valorarán las risas del público que disfrutó en el Teatro Circo de Albacete.

Foto: Lucia González-Aron Multimedia
Además, la jornada contó con más actividades como el montaje Conquistadores y unas interesante charla para profesionales titulada Artes escénicas para la transformación social. El giro educativo.
María López Insausti. Elena Millán. Elena Martínez. Nacho Vilar. Las calles de Albacete son un ir y venir constantes de nombres desconocidos para el gran público de los que estos son solo una pequeña muestra. En el improvisado espacio de la Filmoteca tras la inesperada lluvia vemos a Sandra Silva (Sansilvania), la distribuidora de Swing Machine Orchestra Paseando el swing ve cómo se acopla todo en un espectáculo pensado inicialmente para hacerse en la calle en la Plaza del Altozano. Gracias al equipo técnico del Festival que supo reaccionar a tiempo todo está listo y podemos disfrutar en este estupendo espacio de la música. Como ya no estamos en la calle, nos invitan a hacer el concurso de baile desde nuestras butacas y finalmente dos personas son las ganadoras del disco. Así, nos encontramos con una propuesta diferente con la que esta formación se acerca al público para crear una gran pista de baile y moverse al ritmo trepidante del swing de los años 30. Durante este Paseando el Swing suenan melodías como Mambo nº 8 que pusieron a bailar al respetable desde sus butacas. Estaremos muy atentos al recorrido de esta innovadora orquesta de cuerdas swing . Desde luego a todo el público nos metieron el ritmo en el cuerpo y salimos con una sonrisa de lado a lado de la cara, ¿Qué más se puede pedir? Dentro de la diversidad de propuestas que la Feria acoge estos días, es un soplo de aire fresco algo así.

Foto: Lucia González-Aron Multimedia
Nos acercamos sin descanso al Auditorio Municipal para ver un espectáculo sorprendente. Allí está recibiendo al público Cristina Gandarias, distribuidora del mismo que espera la reacción de público y programadores. La propuesta se titula Low cost (por bailar). Desde que entramos en la sala, el espectáculo ya ha comenzado con una supuesta limpiadora en escena y algunos elementos de atrezzo como una curiosa oveja que a buen seguro sorprendieron al respetable. Cuando se levanta el metafórico telón algo nos hechiza. Es un niño de apenas 10 años. Se llama Rubén Guerrero. Sus movimientos en el escenario con esa imagen angelical y ese pelo rizado nos dejan pegados a la butaca. Ha nacido una estrella. En una carrera tan difícil como la de la danza, este niño que se muestra seguro sobre el escenario incluso cuando le toca dar un discurso con el que conecta todo el público, torna en un niño mucho más tímido cuando se echa el telón y el público le echamos ‘flores’ por su inmenso trabajo, ¿Cómo se puede meter esa fuerza y ese carisma en un cuerpecito tan pequeño? Me reitero. Ha nacido una estrella. Gracias a todo un maestro de la danza – ¡Qué lujazo ver en escena a Fernando Hurtado!- por descubrirnos a este pequeño Billy Elliot en potencia.

El día se cierra con más danza. Es elogiable que el equipo liderado por Antonio Campos haya dado también un espacio destacado a esta arte escénico que tanto enamora a una parte importante del público y que cada vez cuesta encontrar más en las programaciones de los teatros. Desde luego, tiene su público como se demostró en el Teatro Circo de Albacete donde aplaudieron la exquisita técnica de Dantzaz con su espectáculo Bat 2021 que hizo las delicias del público amante del arte de la danza.

La jornada terminó con las emociones aún a flor de piel por un día que empezó a primera hora de la mañana con Blancanieves de La Chana Teatro a la que seguirían DEMO, Elegía del momento, La mojiganga de los Bufones y Enlorquiadas. Un día más distribuidores, programadores, productores y otros oficios escénicos poco conocidos fueron los verdaderos protagonistas de la función.