Las reseñas de Alberto Morate: A VUELTAS CON LORCA, toma este vals

Lorca ya para siempre joven. A pesar del espanto que produce imaginar su muerte, su fusilamiento. Pero el poeta sobrevivió y está con nosotros. Emocionando nuestros sentidos, con sus personajes y sus versos, con sus palabras y dibujos, con su música y su teatro, con todos los que lo queremos.

Nos vamos a dar un paseo con Lorca, A vueltas con Lorca, y se viene (o nos lo trae) Carmelo Gómez, con su maleta de bululú, con camiseta a rayas de titiritero, con su sombrero de acento circunflejo para brindar por el futuro con esperanza. Y no viene solo, que se trae un piano (Lorca era un gran pianista) y a Mikhail Studyonov, que es ucraniano (¿o se dice ucranio?) y estamos con él, y solo la poesía y la música nos salva. Bueno, y el teatro.

Es lo que vemos, teatro, poesía, oímos música, recuerdos, y un entrelazado entre Federico García Lorca y otros poetas altamente vanagloriados. Machado, Lope de Vega, Cervantes,… todos pululan por el escenario. En la voz y en el cuerpo de Carmelo Gómez, que da vueltas y vueltas, que lo hace con desparpajo, simpático, cambiando tonos, saltando de uno a otro, haciéndolo fresco, rico en matices, siguiendo los pasos de Lorca, pero a saltos.

La dirección es de Emi Ekai que lo deja hacer pero, cómplice también en el texto, le marca para que no sea excesivo y se produzca un espectáculo que no es un monólogo, sino un recorrido, una fiesta sin globos, como cuando un niño le enseña a otro su habitación llena de trastos y juguetes, y los dos, ilusionados, van inventando historias, imaginando, haciendo personajes, imitando, que eso es la catarsis, sentirse identificados, volver a las circunstancias, ser comedia y ser drama, arrebatarse ante lo que la mente va creando.

Es un acto de vindicación, de recuerdo, de juventud, de vida, de simbiosis,… es el cuarto de la Residencia de Estudiantes donde Lorca invita a sus amigos (en este caso Carmelo a los espectadores) a imaginar, a encender la luz, a dar vueltas por el jardín sorprendiendo a los desprevenidos, a bailar un vals, a recitar poemas, a inventar escenas, a constatar que Federico ha salido de sus horas oscuras, para llegar al amanecer donde, por muchos disparos que suenen, no conseguirán su objetivo de darle muerte.

¡Ay, ay, ay, ay! Toma este vals, este vals, este vals, del te quiero siempre” y ven a oírlo y revivirlo con las ganas de un ilusionado adolescente.

Alberto Morate tiene el teatro como modus vivendi. Durante más de 40 años ha sido profesor de dramatización, ha dirigido grupos de teatro, ha escrito obras y ha interpretado ocasionalmente como actor. Desde el año 2014 también reseña funciones y espectáculos. Realiza sus crónicas con un estilo peculiarmente poético, haciendo hincapié en el tema, y comentando las representaciones desde un punto de vista emocional, social y humano.

Miguel del Arco, Carmelo Gómez y Nacho Vigalondo en EL NUEVO DILUVIO MAGAZINE

LLega un nuevo número de EL NUEVO DILUVIO MAGAZINE cuando está a punto de cumplir cuatro años en la red. En este número nos hemos rodeado de un reparto de lujo. El director teatral del momento, Miguel del Arco nos presenta su versión de «De Ratones y Hombres» que triunfa en el Español. Junto a él pasarán por este diluvio Irene Escolar, Fernando Cayo y Roberto Álamo, protagonistas de la función.

Otro de los protagonistas de este número será Nacho Vigalondo, uno de los directores del cine español más polémicos, acaba de estrenar «Extraterrestre» y ya prepara «Windows».

Otros nombres protagonistas serán el dramaturgo Paco Bezerra y Carmelo Gómez que está viviendo un momento dulce gracias al teatro. Julieta Serrano, Emilio Gavira, Gemma Cuervo y Tomaz Pandur serán también protagonistas de este número tan especial.

Los Ercilla premian la trayectoria de Gemma Cuervo

Es una de las actrices más queridas por el público. Las nuevas generaciones la han conocido por sus trabajos en Aquí No Hay Quien Viva y La Que Se Avecina, pero Gemma Cuervo es muy recordada por sus trabajos en el mítico Estudio 1. La Cuervo llevaba años sin subirse a un escenario y ha decidido retomar su labor sobre las tablas con un personaje que permanece en el imaginario colectivo de los españoles, La Celestina. Mañana mismo recibirá el recocimiento a toda una vida dedicada a la interpretación en una gala que se celebrará en el Hotel Ercilla de Bilbao.

No será la única premiada en esta noche tan especial para las artes escénicas. Por el céntrico hotel bilbaíno también pasará Carmelo Gómez, que con su portentoso papel en Elling ha encandilado al público y al jurado de los premios. Suyo será el premio al mejor actor protagonista. En la categoría de reparto, el premio recaerá en el inmenso trabajo de Emilio Gavira en La Caída de los Dioses, una obra a la que caerá también otro galardón. La entrañable Julieta Serrano con su tierno personaje en La Sonrisa Etrusca también será protagonista en una noche en que la producción vasca Contra el Viento del Norte, Beaumarchais y los toros tendrán también sus galardones.

"Elling" reúne a Carmelo Gómez y Javier Gutiérrez sobre las tablas del Arriaga

 Son dos de los actores más queridos por el gran público y Andrés Lima, uno de los directores más reputados en España, los ha reunido en un montaje que se verá entre el viernes 9 y el domingo 11 de diciembre en el Teatro Arriaga de Bilbao. La obra que protagonizan Carmelo Gómez y Javier Gutiérrez llegará al Teatro Victoria de Madrid el 18 de enero con un montaje que promete.

Elling y Kjell Bjarne son dos cuarentones que viven recluidos en un hospital psiquiátrico de Noruega. Ninguno de los dos tiene un diagnóstico claro, por lo que su gobierno decide trasladarlos a un piso de “adaptación”, donde puedan prepararse para la vida “normal”.

Sin embargo, para esta pareja, llevar a cabo las actividades más elementales y corrientes, se convierte en un peligroso safari por la jungla urbana.Elling” es una comedia conmovedora que nos propone una interesante reflexión. Una pareja aislada durante años en un sanatorio psiquiátrico con la única enfermedad diagnosticada de no ser capaces de adaptarse a la vida en sociedad. Quizá su “enfermedad” sea que no pueden dejar de ser niños y convivir en un mundo donde sólo los más fuertes sobreviven.

Elling” es una apuesta por la amistad, el amor, y la confianza. Tal vez sea necesario crecer, hacerse adulto y enfrentarse a los golpes de la vida, pero seguro que será más fácil con el apoyo incondicional de un buen amigo.