Hace tiempo que quiero escribir sobre nuestras series. Es conocido por los lectores más fieles mi querencia por las series de Bambú y un programa del Plus, España en serie, me parecía una buena escusa para reivindicar la calidad de nuestro ficción televisiva. A través de cuatro episodios, la cadena de pago mostrará la riqueza de nuestras series con testimonios de actores y creativos detrás de éxitos como Crematorio, Farmacia de Guardia, Pulseras Rojas, Águila Roja…
Parece que somos poco dados a hablar bien de lo que se cuece en nuestra industria. Algunos solo ven series americanas, que son los que más saben de estas cosas. Por supuesto que es imposible igualar a la ficción norteamericano, ya querrían las productoras tener la mitad de presupuesto que The Newsroom por poner un ejemplo. El mérito de nuestra ficción es conseguir productos dignos con presupuestos muy ajustados. Y, a veces, hasta se consiguen productos de la calidad de la HBO, véase Crematorio, un producto televisivo de una calidad inconmensurable. Una producción brillante con un reparto magnífico y unos guiones indiscutiblemente sensacionales. Precisamente son sensacionales por ser el reflejo de lo que somos como sociedad. Refleja un momento concreto de nuestra historia de una forma descarnada, cruda y lo hace con maestría, ¿Cómo no recordar el reciente pelotazo inmobiliario y todos esos que se lo llevaron ‘a manos llenas’ ? Todo ello redondeado con el quizá sea el mejor trabajo de Pepe Sancho, un actor de raza al que echamos y mucho de menos.
Más allá de ese bendito milagro de la televisión de pago, hay buenos ejemplos de ficción de calidad- me dejaré alguna por el camino seguro- que arrasan fuera de España. Es uno de los puntos que se resalta en la serie, aún por estrenar, del Plus. Series como El internado, Aquí no hay quien viva o Los serrano triunfan en países tan aparentemente diferentes a España como Rusia y, ojo al dato, ¡Finlandia! Incluso hacen versiones autóctonas de nuestras series, ¿Tan malas no serán no? Por intentar ordenar un poco este artículo, me referiré a la línea de ficción de las tres principales cadenas.
La 1. Siempre se ha dicho que el perfil del público de la cadena de todos los españoles es tirando a edad avanzada. Si eso quiere decir calidad, compro. Creo que es la cadena de la que más series he seguido. Desde luego Cuéntame cómo pasó me parece un producto brillante, pero también me lo pareció Desaparecida, una de las mejores series producidas en España sin ninguna duda. Detrás de esa serie se encontraba Ramón Campos, uno de los creativos televisivos a los que más admiro. Una producción de primera con un reparto de calidad superlativa. Carlos Hipólito, Luisa Martín y Miguel Ángel Solá, palabras mayores. No sigo Isabel ni Águila Roja, no me han enganchado, pero admito el mérito de levantar producciones así. Y volvemos a Campos. Gran Reserva, culebrón de viñedos con buenos guiones, un nivel de producción de primera y un reparto… ¿Quién sería capaz de juntar a Emilio Gutiérrez Caba, Ángela Molina, Manuel Galiana y Gloria Muñoz? Otros productos dignísimos han sido Amar en tiempos revueltos y Herederos o cómo hacer un culebrón con estilo y elegancia. Otra serie fantástica, Pelotas, estuvo dos temporadas en antena y podría haber durado bastante más. Gran trabajo del tándem Juan Cruz- José Corbacho. Otra más, Mujeres, vista por La 2 y La 1. Una serie gracias a la cual descubrí a actores maravillosos como Inma Cuevas, Carmen Ruiz o Victor Clavijo.
Antena 3. La cadena de Farmacia de Guardia, sin duda un punto y aparte en nuestra ficción, ha optado por series de diversa temática. Comedias como la brillante Aquí no hay quien viva o incluso misterio, véase El internado o Luna, el misterio de Calenda. Bambú, la productora de Ramón Campos, ha producido Hispania, Imperium y Gran Hotel entre otras series para la cadena. Hispania e Imperium, dos producciones difíciles de levantar en plena crisis. Para la segunda, que lamentablemente no funcionó, se fueron a rodar a los míticos estudios Cine Cittá. El hotel cerrará sus puertas muy pronto también. Concha Velasco, Adriana Ozores, Manuel de Blas, Juan Luis Galiardo y recientemente Lluís Homar. Solo por ver los últimos minutos en pantalla de Galiardo junto a la Velasco ha merecido la pena seguir esta serie. También me gusta actualmente Con el culo al aire, verdadera picaresca de nuestros tiempos con unos fantásticos Paco Tous, Carmen Ruiz y Raúl Arévalo.
Telecinco. Quizás sea la cadena en la que menos series he seguido. Médico de familia, Cámera café y poco más. Bueno, 7 vidas, la mejor sitcom producida en España, sin ninguna duda. Y actualmente también sigo las aventuras de los inquilinos de Mirador de Montepinar, véase La que se avecina.
Tv movies. En este último bloque me refiero a las películas para televisión. En este campo hay varios ejemplos de brillantez. Empecemos por la reciente Carta a Eva. Buen reparto, buen guión y, importante, un nivel de producción a la altura de una película hecha para la pantalla grande. Lo mismo podría decir de 23 F, Los últimos días de Franco, Tarancón y El Solitario entre otras. Funcionan relativamente bien a nivel de audiencia y crean industria. Ya estoy deseando ver Concepción Arenal, la visitadora de cárceles con Blanca Portillo.