La compañía granadina Títeres Etcétera acaba de triunfar en el Teatro Real con El Retablo de Maese Pedro, uno de sus montajes más espectaculares. En su vuelta a Madrid, al Teatro Valle Inclán, habrá un cambio total de registro con El Alma del Pueblo. Se podrá disfrutar en la Sala El Mirlo Blanco los días 9 y 10 de abril dentro de Titerescena. Desde mi butaca COMUNICA vuelve a colaborar con la compañía tras el éxito en 2014 de Soñando el carnaval de los animales en el Teatro Fernán Gómez.
Paisajes, climas, vegetación, regímenes políticos, religiones, comidas, colores, vestimentas, ambientes, ritmos… Todo esto y más configura al ser humano, lo hace diferente a la vez que parecido, único en la variedad, similar en el conjunto. La relación con los objetos no es ajena a esta evidencia. Desde los más cotidianos, hasta las formas de navegación y transporte, las herramientas, los instrumentos musicales…
El títere tradicional es una metáfora de estas diferentes vidas humanas. Está presente en culturas muy distantes, siempre síntesis del pensamiento, la espiritualidad, la sensibilidad, el saber hacer de cada sociedad. El títere es esa encrucijada en la que se encuentran y cruzan formas de artesanía, materiales y herramientas, danzas, músicas, cantos, mitos, historias, máscaras, formas teatrales. Toda la vida converge hacia el títere y este es un hermoso reflejo de su gente, el alma del pueblo…

Muchas tradiciones de títeres han llegado hasta nuestros días con varios siglos de historia. Sin embargo, en el siglo XXI los cambios sociales son una amenaza visible que nos lleva a pensar que muchas de estas van a desaparecer rápidamente.
Ante esta certeza, hemos iniciado un proyecto que pretende indagar, documentar y dar a conocer los títeres tradicionales que se conservan actualmente, otra de nuestras iniciativas en la difusión del arte de los títeres.
Este proyecto se desarrollará durante varios años y se irá mostrando paulatinamente, enriqueciendo con nuevos personajes y retratos de artistas vinculados a la actividad titiritera en distintos rincones del mundo.
Sinopsis:
Yanisbel, una especialista y defensora de los títeres, entra en escena para hablar sobre tradiciones amenazadas, maestros sin discípulos, coleccionistas, sobre las diferentes formas de construir los títeres, y de transmitir a los más jóvenes el oficio, según las distintas culturas. Comienza haciendo referencia a Don Cristóbal, el héroe popular español, títere de guante prácticamente desaparecido. Y recuerda aquella función histórica llamada Títeres de cachiporra, que hicieron Manuel de Falla, Federico García Lorca y Hermenegildo Lanz en Granada, el 6 de enero de 1923. Para ayudar a Yanisbel en estos menesteres, un miembro de la compañía, JFJ, es el encargado de poner las imágenes de vídeo. Pero este personaje, que es un titiritero de “raza” quiere más. Él no se contenta con “darle al botón”, sino que quiere actuar, jugar en directo… Intentando ayudar a Yanisbel, JFJ comienza poco a poco a intervenir -tocando el violín, mostrando títeres de diferentes técnicas. Pero ella prefiere que él permanezca quieto tras la pantalla y que el público preste más atención a los vídeos que se van proyectando; por eso reprime los gestos de su colega. Sin embargo JFJ consigue salirse con la suya -actuar en directo- saca un teatrito y hace una escena de guante, protagonizada por el inmortal Pulcinella. De la pantalla van surgiendo también títeres de diferentes lugares del mundo: un calao, marotte de la tradición maliense, llega de pronto a las manos de Yanisbel, un hada vietnamita que baila sobre el agua se coloca en el centro de la escena, y se crea una rica confabulación entre unos planos de realidad y otros.
Otras consideraciones:
El alma del pueblo es una llamada de atención, un acto de amor al arte de los títeres.
Muchas tradiciones de títeres han llegado hasta nuestros días con varios siglos de historia. Sin embargo, en el siglo XXI los cambios sociales son una amenaza visible que nos lleva a pensar que muchas de estas van a desaparecer rápidamente. Ante esta certeza, hemos iniciado un proyecto que pretende indagar, documentar y dar a conocer los títeres tradicionales que se conservan actualmente, otra de nuestras iniciativas en la difusión del arte de los títeres. Títeres con una estética hiperrealista, construidos con materiales y técnicas contemporáneas, se combinan con una actriz en directo, títeres de tradiciones milenarias, y numerosos vídeos, creando un gran contraste entre las distintas formas de expresión, y trastocando en el espectador los límites entre la ficción y la realidad Este proyecto se desarrollará durante varios años y se irá mostrando paulatinamente, enriqueciendo con nuevos personajes y retratos de artistas vinculados a la actividad titiritera en distintos rincones del mundo. Este espectáculo es una manera de ir compartiendo con el público esas tradiciones y maestros que vamos documentando. En escena se crea pues una tensión entre los títeres en directo y los filmados, entre la realidad que pasa a través de una pantalla y esa otra más directa y palpable, entre el espectáculo en vivo y la imagen audiovisual